La Habana. – La primera bailarina del Ballet Nacional de Cuba, Sadaise Arencibia, se despedirá de los escenarios el próximo 23 de abril con una emotiva presentación que marcará el cierre de una trayectoria de 25 años en la danza clásica. La función será parte de la 31ra edición del Festival La Huella de España, que se celebrará en la sala Avellaneda del Teatro Nacional de Cuba.

La gala, dedicada a la danza española, será un homenaje a la carrera de Arencibia, quien elegirá para su última actuación la emblemática obra Bodas de sangre, un ballet creado por Antonio Gades a partir del texto homónimo de Federico García Lorca. Esta obra forma parte del repertorio del Ballet Nacional de Cuba, y en esta ocasión, los roles protagónicos serán interpretados por el primer bailarín español Joaquín de Luz (Leonardo), las primeras bailarinas cubanas Viengsay Valdés (La Novia) y Sadaise Arencibia (La Mujer), y los roles del Novio y la Madre estarán a cargo de Daniel Martínez y Clotilde Peón, respectivamente.

Con esta presentación, Arencibia pondrá fin a una carrera que comenzó el 17 de julio de 1999, cuando debutó en el Ballet Nacional de Cuba con la obra Rara Avis, bajo la coreografía de Alberto Méndez.

25 años de carrera y una despedida inolvidable

El Ballet Nacional de Cuba, al anunciar su retiro en redes sociales, recordó que, aunque muchas personas no asocian a Arencibia con personajes de la danza española, su máxima expresión ha sido alcanzada en papeles del repertorio clásico y romántico, como Giselle, Odette y Aurora. A pesar de ello, destacó sus interpretaciones memorables de Kitri y Carmen, dos de los personajes más emblemáticos de la danza española.

En cuanto a su interpretación de La Mujer en Bodas de sangre, Arencibia ya había encarnado este personaje en el jubileo por los 75 años del Ballet Nacional de Cuba en octubre de 2023.

A lo largo de su carrera, Sadaise Arencibia ha sido elogiada por su delicadeza y elegancia, especialmente en papeles como el Cisne Blanco en El lago de los cisnes. En una entrevista concedida en 2008, el crítico británico Clement Crisp destacó la «gracia delicada» de Arencibia, refiriéndose a su estilo único y su presencia en el escenario.

En 2006, debutó en el papel de Giselle durante el 20mo Festival Internacional de Ballet de La Habana, junto al renombrado bailarín cubano José Manuel Carreño. En 2009, fue promovida al rango de primera bailarina del Ballet Nacional de Cuba, posición que ocupó hasta su retiro.

Este 23 de abril, Sadaise Arencibia recibirá su última gran ovación, dejando un legado imborrable en la danza cubana e internacional.

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